viernes, 29 de junio de 2012

Robots, pastillas y caramelos


Saludos posibles invadidos

Como les comente hace poco -menos de un día- intentaré escribir de la manera más seguida posible. En esta ocasión será sobre un libro de cuentos, pero primero agradeceré a Fresi, una amiga de que estudia Literatura, por prestarme este libro -ojalá me lo hubiese regalado.

Portada del libro
Cuentos sociales de ciencia-ficción es un libro de Juan Rivera Saavedra, escrito en 1976 y con prólogo de Antonio Gálvez Ronceros, que narra diversas historias, muy breves, de situaciones alocadas (aún para alguien que llega a este libro treinta y seis años después). Los cuentos son breves, el más largo es de dos carillas y un poco más. Pero el contenido y la carga de cada uno de ellos es impresionante.

No puedo quejarme de ninguno pero tengo que elegir unos pocos para comentar. Me quedo con tres: el primero se llama «Uno» que cuenta la historia de un joven trabajador que es golpeado por un celoso colega bastantes años mayor que él -no se preocupen no les haré spoiler. El segundo es «Sensación» donde un pobre hombre es atormentado todas las noches por inquietantes sonidos y pequeños golpes que no lo dejan dormir, angustiado acude a un psiquiatra y este le dice que todo esta en su mente que lo que tiene es "sensación" y le prescribe unas enormes pastillas... ¿todo estaba en su mente?. Y, finalmente, «El recogedor»  donde Noveno Santa Cruz es testigo de una sucia práctica que se comete contra los que siempre llevan las de perder: los pobres (no sólo de bienes sino también de espíritu).

Juan Rivera Saavedra

El primer cuento es -parafraseando a Ronceros- una historia en donde se muestra la cosificación del hombre y la humanización de la cosa; no permitamos eso, no perdamos lo que nos hace únicos por culpa de los bienes, no perdamos de vista lo que realmente importa. «Sensación» me recuerda el objetivo de este blog, permitir escuchar, callar y obedecer con la cabeza gacha no es algo que pretendo aceptar. «El recogedor» en cambio es -ahora parafraseando a un profesor mío que parafrasea a César Rodríguez Rabanal- el resultado de las Cicatrices de la pobreza: el envilecimiento, sobrevivir sin que importe el resto.


Les dejo con el último cuento, disfrútenlo... "Brevedad, precisión y concisión".



jueves, 28 de junio de 2012

Bienvenidos y gracias


Buenos días posibles invadidos

Empiezo esta aventura 2.0 gateando y espero aprender a caminar y correr dentro de poco. La razón por la que crearé, estoy creando, creé -es complicado manejar el tiempo acá- este espacio es simple, por egoísmo. Quiero hacer sonar mi voz -o leer mis letras- con respecto a algo que me tiene reflexionando, intentando al menos. Ese algo tiene que ver con el título -no podría ser diferente.

Lo que me tiene preocupado es la facilidad con que algunos piensan que los medios nos controlan. Y cuando me refiero a medios hablo de las grandes máquinas productoras de versiones de realidad. ¿Qué tan fácil es caer en su juego, en su red? ¿Qué tan difícil podrá ser salir, es suficiente con darnos cuentas que caímos para salir? ¿Tanto nos invaden los medios? ¿Nos consideramos invadidos?

Si los medios tienen tal fuerza y contundencia, me niego a aceptarlo. Y me niego no con el afán de cerrarme ante la realidad, me niego pues estoy dispuesto a buscar la manera en que no sigamos así. Siempre se dice que la respuesta es la educación, estoy completamente de acuerdo; el tema es ahora cómo educar a los que no tienen acceso a tal regalo, cómo cumplir con ese derecho y deber que debe ser para todos, pero lo más importante cómo educar a los que quieren que las cosas sigan como están... a esos que viven a costa de la desinformación y la miseria (desde el corruptor más simplón hasta el que viste lujosos vestidos).

Soy un joven de diecinueve años, estudio Comunicación Social, soy un orgulloso sanmarquino y también soy un ignorante. Aprenderé e intentaré plasmar eso en cada uno de las publicaciones. Esta no es una tarea mesiánica, no estoy solo, hay y habrá gente más genial e iluminada; aprenderé de ellos también. Soy un grano de arena en el desierto -por más trillada que sea la frase.

En este blog intentaré poner de todo lo que pueda tener relación con lo que me interesa como comunicador, como ciudadano, como intelectual (todos hacemos ejercicios intelectuales, déjenme ponerme ese título una sola vez) y como humano. Desde crónicas, opiniones y reflexiones (de lo que considere importante), recomendaciones de libros, de películas, de música que lleguen a mis manos.

Esta carta se volvió larga a pesar de mis intentos por ser lo más escueto posible. "Brevedad, precisión y concisión".

Saludos y hasta la próxima

Daniel Morcillo